viernes, abril 28, 2006

Rosas



Apenas rozó las espinas puntiagudas sintió un incesante dolor, sin embargo fueron los suaves y frágiles pétalos los que provocaron la herida...

4 comentarios:

Úrsula dijo...

Nada é o que parece. Desconfia de quem este sempre de acordo contigo

perezreverte dijo...

Es lo que más herida puede dejar. porque te impresiona. Besos troll.

Anónimo dijo...

a veces la dulzura, puede matarte de un exceso de glucosa...a veces, la suavidad, puede irritar tu piel....por eso, a veces, daña el petalo, y no la espina...quiza sea, pienso yo, porque estamos mas acostumbrados al dolor agudo de la segunda, y no al suave malestar que nos causaria el primero...

Anónimo dijo...

Me encanta, es precioso. Tiene mucha razón y es que a veces, aunque cueste creerlo, lo más hermoso y delicado, tambien puede clavarnos esa espinita en el corazón, como si fuera la única herida que tenemos en la vida .. en fin, siempre dejan huellas hagas lo que hagas y estes donde estes ... Vas a conseguir que me guste la literatura!!a lo mejor hasta te hago la competencia... jiji